Cuetzalan, Puebla. – En lo alto de la Sierra Norte de Puebla , entre caminos envueltos por neblina y montañas cubiertas de café, se esconde Cuetzalan del Progreso , uno de los Pueblos Mágicos más encantadores de México . Sus calles empedradas, su arquitectura colonial y el aroma constante a tierra mojada lo convierten en un destino que parece detenido en el tiempo.
Encantos naturales y tradiciones vivas
El pueblo ofrece un sinfín de atractivos turísticos para los amantes de la naturaleza y la aventura . Destacan las cascadas Las Brisas , Corazón del Bosque , Las Golondrinas y Atepolihui , donde los visitantes pueden nadar o disfrutar de caminatas entre paisajes selváticos. También son imperdibles las grutas de Atepolihui y Cuetzalan del Progreso , un viaje subterráneo por cuevas de piedra caliza que muestran la riqueza geológica de la región.
Pero Cuetzalan no solo es belleza natural: es también un santuario cultural. Aquí, los voladores de Papantla se lanzan al cielo frente a la Iglesia de los Jarritos , mientras las mujeres nahuas venden bordados, flores y café artesanal en el mercado dominical. Cada rincón guarda un pedazo de historia indígena y mestiza que sigue viva en sus fiestas, su música y su gente.
Gastronomía con alma serrana
La comida tradicional es otro de los grandes atractivos de Cuetzalan. En sus fondas y cocinas comunitarias se preparan tamales de frijol, mole poblano, tlayoyos, chiles rellenos y café de olla recién hecho. El yolixpa , un licor ancestral elaborado con hierbas medicinales, es símbolo de hospitalidad y parte esencial de la identidad local.
Los visitantes también pueden recorrer las fincas cafetaleras y conocer el proceso artesanal del tostado, así como disfrutar del aroma del café orgánico de altura , considerado uno de los mejores del país.
Un viaje al corazón de Puebla
Más que un destino turístico, Cuetzalan es una experiencia sensorial y espiritual . Es el sonido de las campanas en la neblina, el sabor a café recién molido y el eco de una cultura que se niega a desaparecer. Quien llega hasta aquí, entiende por qué este rincón de Puebla ha sido reconocido como uno de los lugares más mágicos de México.