Ciudad de México, México. – Mientras los deportistas paralímpicos mexicanos deben costear su propia alimentación y recurrir a fondas y taquerías cercanas para poder entrenar, la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) destinó hasta 2,9 millones de pesos en la organización de ceremonias y actos públicos para promover la imagen de su director general, Rommel Pacheco .
Desde octubre, la Conade suspendió el servicio de comedor para los atletas con discapacidad alojados en el Centro Paralímpico Mexicano (Cepamex) , bajo el argumento de que la mayoría había concluido su temporada competitiva. Sin embargo, varios deportistas permanecieron concentrados en las instalaciones y se vieron obligados a pagar entre cuatro y cinco mil pesos mensuales para alimentarse por su cuenta en establecimientos cercanos, como la Fonda Chabe, el restaurante “El Tecorral” y las taquerías “Chiquilín” y “El Paisa de Arandas”. Muchos de ellos, en silla de ruedas, deben desplazarse por avenidas con alto tráfico para poder comer, sin supervisión nutricional ni control de calidad alimentaria.
Ante esta situación, algunos atletas han optado por comprar avena instantáneamente, latas de atún o barras energéticas para subsistir durante las concentraciones, mientras que otros piden comida a domicilio o consumen lo que pueden encontrar en los alrededores del Cepamex. El caso más extremo es el de la atleta Claudia Magaly Miranda , medallista de plata en el Campeonato Mundial de Powerlifting de Dubái 2023, quien es la única deportista que recibe alimentos en las instalaciones gracias a un recurso legal que obliga a la Conade a proporcionalárselos.
La falta de alimentos también afecta a otras instalaciones, como el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (Cnar) , donde apenas se sirven 50 comidas diarias. En el reciente selectivo de clavados, los atletas tuvieron que pagar por sus propios alimentos —sandwiches o box lunch— y desembolsar cuotas adicionales de hasta mil 500 pesos por participar, además de otros 500 pesos por cada prueba y por día de comida. Algunos clavadistas incluso entregaron el dinero directamente al director del Cnar, el exatleta Jahir Ocampo , quien fue visto preparando los alimentos.
Mientras tanto, la Conade firmó un nuevo contrato para 2025 con la empresa Operadora de Comedores Saludables SA de CV , por un monto mínimo de 39 millones de pesos y un máximo de 97.7 millones , para ofrecer servicios alimentarios en Villas Tlalpan, el Cnar y el Cepamex. El precio actual por los tres alimentos diarios asciende a 714 pesos por persona , un incremento del 45% respecto a 2022-2024, y casi el doble de lo que se pagaba en 2020. Pese a estos recursos, los deportistas continúan sin recibir comidas en los centros de alto rendimiento.
Paralelamente, la institución asignó entre 1.6 y 2.9 millones de pesos a la empresa Aro Publicidad SA de CV para la planeación y ejecución de ceremonias oficiales de promoción de la Conade y su titular. El contrato, firmado en julio y vigente hasta diciembre de 2025, contempla gastos como un templete con alfombra de más de 200 mil pesos, servicios de streaming por 52 mil, pantallas LED, carpas, plantas de luz y coffee breaks ejecutivos con precios superiores a 600 pesos por persona.
El evento más reciente organizado bajo este contrato fue “Lo Mejor del Deporte Mexicano” , celebrado en el Cnar con un despliegue mayor al del propio Premio Nacional del Deporte , otorgado por la Presidencia de la República. Al acto asistieron Rommel Pacheco y exfuncionarios de la Conade, entre ellos Daniela Caballero , ex titular de Comunicación Social, quien dejó el cargo el 1 de agosto pero continúa participando en eventos y gestiones internas de la dependencia.
Una investigación en campo reveló que Aro Publicidad no cuenta con oficinas reales en la dirección registrada —Avenida Presidente Masaryk 101, en Polanco—, donde opera únicamente un espacio de coworking. El personal de seguridad del edificio confirma que no existe ninguna oficina con ese nombre ni empleados asociados. Este hecho podría derivar en irregularidades fiscales y en la imposibilidad del SAT para localizar a la empresa en caso de requerimientos.
El procedimiento de adjudicación también presentó anomalías. La licitación fue catalogada como “invitación a cuando menos tres personas”, pero solo participó Aro Publicidad y Fábrica de Recuerdos SC , esta última descalificada por no cumplir con requisitos administrativos. En la evaluación final, se validó la propuesta de Aro Publicidad sin una revisión exhaustiva, pese a inconsistencias en su documentación y en la autenticidad de su sitio web.
En contraste con el gasto destinado a ceremonias y autopromoción institucional, los centros federales permanecen sin recursos suficientes para garantizar la alimentación deportiva de los atletas. En el Cepamex, las instalaciones recientemente rehabilitadas lucen vacías, mientras la Conade insiste en que el presupuesto se aplica conforme a las prioridades del deporte nacional.
La desigualdad en el trato a los deportistas y la discrecionalidad en el uso de los recursos públicos reflejan una gestión que privilegia la imagen institucional sobre las necesidades básicas del alto rendimiento. A pesar de los discursos oficiales, los atletas paralímpicos continúan enfrentando carencias que los obligan a sobrevivir fuera de los comedores cerrados de la Conade, comiendo en fonditas y taquerías mientras los recursos federales se destinan al lucimiento de sus directivos.
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Foto: Especial
Djs
