El histórico mediocampista retirado del Manchester United, Paul Scholes, dio a conocer públicamente que, tras años como analista deportivo ha decidido poner un alto a su faceta como comentarista de futbol, para así dedicar todo tiempo a su hijo Aiden, quien fue diagnosticado con autismo hace unos años.
Comentó que actualmente su principal prioridad es atender el bienestar de su hijo, asegurándose de que mantenga su rutina diaria y reciba el apoyo necesario. El exfutbolista reconoció que, como muchos padres, carga con la inquietud de pensar en el futuro y en lo que ocurrirá cuando él ya no esté para acompañarlo.
Durante años, Scholes evitó hablar abiertamente sobre el diagnóstico de Aiden, pues no se sentía cómodo con los mensajes de lástima que solía recibir por parte de otras personas en la industria deportiva. Consideraba que ese tipo de reacciones no aportaban nada positivo ni a él ni a su familia.
Con el tiempo, decidió compartir su experiencia de manera más abierta, al notar la conexión que generaba con otros padres en situaciones similares. Muchos de ellos encontraron consuelo y fuerza en sus inspiradores palabras, así como la historia de su hijo, lo que llevó al exjugador a dar más visibilidad a este tema.
Hoy, con Aiden ya en la adultez, Scholes ha optado por centrarse completamente en su vida familiar, dejando de lado la televisión y el análisis de encuentros deportivos para enfocarse en las rutinas que su hijo necesita seguir con precisión, ya que considera necesario prepararlo para la vida incluso con su condición.
“Este año tomé la decisión de no participar en retransmisiones en directo debido a Aiden. Como saben, tiene necesidades especiales, y todo mi día gira en torno a sus horarios. Su estructura diaria es muy estricta, así que elegí que todo lo que haga esté orientado a él”, expresó el exjugador inglés en una entrevista.
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Foto: ESPN
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