El desempeño económico de México durante 2024 cerró con un crecimiento moderado, impulsado por avances en prácticamente todos los sectores productivos. De acuerdo con cifras recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el Producto Interno Bruto (PIB) del país alcanzó los 33.5 billones de pesos, lo que representó un incremento del 1.3% respecto a 2023. Aunque el avance no fue acelerado, sí mostró una mejora constante en actividades agrícolas, industriales y de servicios.
Uno de los puntos que más llamó la atención fue el comportamiento estatal. Doce entidades lograron incrementos significativos en su producción anual. Entre ellas, Oaxaca encabezó la lista con un crecimiento del 5.4%, seguido de Zacatecas (4.9%), Durango (4.7%), Guanajuato (4%) y Yucatán (3.9%). Estos resultados muestran que regiones tradicionalmente rezagadas, como el sur del país, están ganando terreno en ciertos sectores, en parte por nuevos proyectos de infraestructura y un repunte en actividades primarias.
No obstante, crecimiento no siempre significa mayor aportación al PIB nacional. Los estados con mayor peso económico se mantuvieron prácticamente sin cambios: Ciudad de México aportó el 15% de toda la riqueza generada en el país, seguida del Estado de México (9.1%), Nuevo León (8.1%), Jalisco (7.5%) y Guanajuato (4.5%). En conjunto, estas entidades concentran buena parte de la actividad financiera, industrial y de servicios del país.
En cuanto al desglose por sectores, el Inegi reportó resultados diferenciados. Las actividades primarias, que abarcan agricultura, ganadería, pesca y aprovechamiento forestal, generaron 1.29 billones de pesos en 2024. Es un rubro clave para regiones rurales y, como suele suceder, algunos estados sobresalieron: Jalisco aportó el 14.7%, Michoacán 10.5%, Veracruz 7.3%, Chihuahua 6.5% y Sonora 5.6%. Este comportamiento se vincula tanto con la exportación agroalimentaria como con un aumento en la producción interna de alimentos.
Por su parte, las actividades secundarias, relacionadas con la manufactura, la minería, la construcción y la energía, generaron 10.38 billones de pesos. Aquí la distribución refleja la concentración industrial del país. Nuevo León dio cuenta del 10.5% del valor total, seguido del Estado de México (7.8%), Jalisco (6.5%), Coahuila (6%) y Guanajuato (5.5%). La fuerza de estos estados está principalmente en la manufactura automotriz, metalmecánica y la industria alimentaria, sectores que mantienen un fuerte vínculo con el comercio exterior.
El mayor peso, como ocurre cada año, provino de las actividades terciarias, es decir, los servicios. Este sector acumuló 19.65 billones de pesos, impulsado por áreas como servicios financieros, turismo, transporte, comercio y actividades inmobiliarias. La Ciudad de México dominó nuevamente con el 21.3%, seguida del Estado de México (10.1%), Jalisco (7.5%), Nuevo León (7.1%) y Veracruz (4.4%). La centralización de servicios corporativos y administrativos en la capital sigue siendo determinante para estas cifras.
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