Washington DC, Estados Unidos. — La designación del cantante puertorriqueño Bad Bunny como artista principal del espectáculo de medio tiempo del Super Bowl LX , programado para febrero de 2026, ha generado una fuerte reacción en sectores conservadores de Estados Unidos. Una de las voces más críticas es la organización Turning Point USA , fundada por el fallecido activista Charlie Kirk , que ha anunciado la realización de un evento alternativo durante la misma transmisión.
El grupo, conocido por promover valores nacionalistas y conservadores entre jóvenes universitarios, considera inapropiada la elección de Bad Bunny, a quien acusan de no representar los ideales “normales estadounidenses”. En un comunicado reciente, Turning Point USA afirmó que organizará su propio show paralelo , con el objetivo de presentar un espectáculo que celebre la “fe, la familia y la libertad”.
La reacción de la organización se suma a los cuestionamientos del expresidente Donald Trump y del actual líder de la Cámara de Representantes, Mike Johnson , quienes también criticaron la decisión de la NFL , Apple Music y Roc Nation . Ambos políticos manifestaron su desacuerdo con la inclusión del artista latino, calificándolo como una figura ajena a los valores culturales del país.
Un espectáculo alternativo con mensaje político.
Turning Point USA confirmó a través de sus redes sociales que su show se llevará a cabo de manera simultánea al evento principal. Aunque aún no se han revelado detalles sobre la ubicación o el canal de transmisión, la organización aseguró que involucrará al público mediante una encuesta en línea para definir el estilo musical del espectáculo. Las opciones incluyen música tradicional estadounidense, alabanzas religiosas, hip-hop e incluso la categoría “cualquier cosa en inglés”.
El objetivo de este evento, según los organizadores, es ofrecer una alternativa que refleje los principios conservadores, en contraste con lo que consideran un enfoque ideológico impuesto por el espectáculo oficial del Super Bowl. A pesar de su postura crítica, Turning Point USA no planea interrumpir el show de Bad Bunny, sino simplemente ofrecer una propuesta paralela para quienes rechacen su presencia en el evento deportivo más visto de Estados Unidos.
Un contexto marcado por tensiones políticas
El rechazo a Bad Bunny ocurre en un clima altamente polarizado. La polémica ha escalado más allá del ámbito del entretenimiento. La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem , advirtió que agentes de ICE estarán desplegados durante el evento para garantizar la seguridad y vigilar el cumplimiento de la ley. En declaraciones recientes, la funcionaria afirmó que solo “estadounidenses que respetan la ley” deberían asistir, insinuando un control migratorio estricto en torno al Super Bowl.
Noem también criticó duramente a la NFL, acusando a la liga de enviar un mensaje político a la administración de Donald Trump. "Nos mantendremos firmes al final del día. Esta elección no refleja los valores que defendemos", declaró.
El legado de Turning Point USA tras la muerte de Charlie Kirk
Tras el asesinato de Charlie Kirk , figura clave del movimiento conservador juvenil en EE.UU., su esposa Erika Kirk asumió la presidencia de Turning Point USA. La organización ha continuado con su línea ideológica, reforzando su presencia en los medios y redoblando sus campañas en temas como inmigración, educación e identidad nacional.
Bad Bunny, cuya popularidad ha trascendido fronteras, se ha mantenido al margen de la controversia hasta ahora. No obstante, su presentación en el Super Bowl LX podría convertirse en uno de los momentos más debatidos del próximo año, a medida que se acercan tanto al evento deportivo como las elecciones presidenciales de 2026.
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Foto: Redes sociales
djs
