La Secretaría de Planeación, Finanzas y Administración (SPFA) de Puebla estima saldar el préstamo de 2 mil millones de pesos, para pagar la deuda del Museo Internacional Barroco (MIB), en un lapso aproximado de un año.
Una vez que el gobernador Alejandro Armenta Mier confirmó esta solicitud al Grupo Financiero Banorte, su administración estableció liquidarlo como parte de un compromiso financiero que se hizo a corto plazo.
Fue la mina titular de la dependencia estatal, Josefina Morales Guerrero, quien comentó que se cumple con la normatividad en disciplina financiera, por lo que no se genera ningún tipo de daño a las arcas estatales.
Explicó que el método de pago, se dispuso cubrirlo a partir de los recursos propios que genere en los próximos meses, incluso con las economías o remanentes disponibles que se tengan durante el año.
Bajo el argumento que se rige este monto, no ocurrió por falta de recursos, sino porque se dispuso la cantidad tras haber etiquetado todo el presupuesto para el Ejercicio Fiscal del 2025.
“Nosotros tenemos un presupuesto aprobado y está destinado para la ejecución en los diferentes programas de gobierno, no se interrumpió ninguna ejecución de programas, por eso fuimos a un financiamiento, que es lo que te permite atender un gasto emergente de momento”, expresó.
La Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio (TIIE) es de 28 días, con una tasa efectiva del 9.4 por ciento anual, por lo que el monto que se tendría que pagar además de los 2 mil millones de pesos, serían 94.8 millones.
A su vez, acordaron una sobretasa del 0.32 por ciento, mientras que el contrato del financiamiento se concretó el pasado 26 de agosto, de acuerdo con el registro de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y quedó inscrita formalmente dos días después, tras ser informado a la Federación.
En los planes del mandatario estatal, el recurso se adquirió para subsanar otro adeudo adquirido en la administración de Rafael Moreno Valle Rosas, al liquidarlo de manera anticipada y ahorrando 8 mil millones de pesos.
A través de este mecanismo, se resuelve la “corrupción” heredada, toda vez que se hubiera pagado, como estaba el contrato de construcción y operación del MIB, 10 mil millones de pesos.
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