Los Ángeles, California.- El reconocido cineasta Paul Schrader, célebre por su labor como guionista de Taxi Driver y director de First Reformed , ha manifestado su interés en realizar una película íntegramente desarrollada con inteligencia artificial, e incluso aspira a que sea una IA quien la crítica. Así lo expresó en una reciente entrevista con la revista Vanity Fair , publicada el 24 de octubre de 2025, donde también sostuvo que la industria cinematográfica está a las puertas de una nueva etapa marcada por la influencia tecnológica en los procesos creativos y críticos.
Schrader, actualmente visible en la docuserie Mr. Scorsese de Apple TV+, reveló que cuenta con un guion especialmente adecuado para ser llevado a cabo mediante herramientas de inteligencia artificial. Según explicó, los avances técnicos ya permiten prescindir de actores y equipos humanos, reemplazándolos por elementos generados digitalmente.
Durante la conversación, relató que había discutido con un colega sobre esa posibilidad: “Este guion sería perfecto para hacerlo todo con IA”, comentó. Para él, esta tecnología no representa una amenaza para el arte, sino una evolución lógica de las herramientas narrativas. Comparó el trabajo del escritor con el de un “pixelador” capaz de modelar emociones y rostros digitales con la misma precisión con que un autor describe reacciones en una novela.
Schrader considera que el primer largometraje creado completamente con inteligencia artificial está a tan solo un par de años de distancia. Con esta postura, se posiciona entre los primeros cineastas veteranos en apoyar abiertamente la incorporación de la IA, no solo en la producción cinematográfica, sino también en su análisis crítico.
El director también reflexionó sobre el impacto de la IA en la crítica de cine, asegurando que las herramientas automatizadas ya son capaces de ofrecer reseñas más objetivas que las realizadas por algunos redactores humanos. En su opinión, la imparcialidad algorítmica representa una alternativa valiosa frente a las presiones comerciales o editoriales que muchas veces condicionan la cobertura tradicional. “La IA ofrece una cobertura mejor que el promedio, y no tiene que favorecer a nadie”, señaló.
Formado inicialmente como crítico y discípulo de Pauline Kael, Schrader argumentó que este tipo de análisis podría renovar la forma en que se evalúan las obras cinematográficas, aportando mayor transparencia y alejándose de compromisos personales o intereses económicos. Subrayó que su interés por la IA no parte de un rechazo al talento humano, sino de una visión pragmática sobre la evolución del lenguaje audiovisual.
A punto de cumplir 80 años, Schrader continúa activo y provocador. Administra personalmente su cuenta de Facebook, donde publica comentarios sobre películas recientes. Asegura que evita las críticas directas en esa plataforma y prefiere generar debate, bloqueando a quienes intentan contradecirlo de forma hostil.
Con una carrera marcada por relatos introspectivos, personajes atormentados y temáticas de redención, su inclinación hacia la inteligencia artificial resulta sorprendente. Mientras otros cineastas de su generación se muestran escépticos ante estas tecnologías, Schrader las ve como una prolongación natural del acto creativo.
Así, el creador atención de American Gigolo no solo observa con el rumbo del cine, sino que se propone incidir en él. Y si finalmente se concreta la realización del primer filme completamente generado por IA, no sería extraño que Schrader estuviera al mando... dejando que una máquina dicte el veredicto final.
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Foto: Redes Sociales
Djs
