Con el fondo y el pulso vivo del cerro que los unen, los municipios de Chignautla y Atempan celebraron un profundo Encuentro de Hermandad, en un acto descrito como un abrazo entre comunidades que compartieron raíces, costumbres y sueños, trascendiendo el protocolo para reafirmar un vínculo histórico tejido con respeto, devoción y alegría.