El comercio internacional enfrentará un desafío importante en 2026 debido a la entrada en vigor de los nuevos aranceles impuestos por Estados Unidos, que aumentaron de un promedio de 2.4 % en años anteriores a 17.4 % en 2025, la cifra más alta desde 1935. Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), los efectos completos de estas medidas se reflejarán principalmente el próximo año, cuando la desaceleración del comercio global será más evidente.
José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la Cepal, explicó que en los últimos meses las importaciones estadounidenses mantuvieron cierta vitalidad debido al adelantamiento de compras por parte de empresas que buscaban evitar los aranceles. Sin embargo, este impulso es temporal, y la Organización Mundial del Comercio (OMC) proyecta que el comercio global crecerá apenas 0.5 % en 2026, reflejando el enfriamiento económico generado por las políticas arancelarias.
Las medidas adoptadas por Estados Unidos incluyen tasas de entre 25 y 100 % en sectores como automóviles, acero, aluminio y medicamentos. Aunque la mayoría de los países no respondió con represalias directas, lo que suavizó el impacto inicial, la Cepal advierte que la combinación de aranceles altos y bajo crecimiento global exigirá que los países latinoamericanos refuercen su competitividad y diversifiquen sus mercados de exportación.
México, socio estratégico de Estados Unidos
En este escenario, México mantiene un papel central. El país concentra aproximadamente el 75 % de todas las importaciones que EE. UU. realiza desde América Latina y destinó el 81 % de sus exportaciones al mercado estadounidense en 2024. Las cadenas de suministro norteamericanas dependen de la región para sectores estratégicos, incluyendo la manufactura de vehículos, autopartes, equipos médicos y computadoras personales.
La dependencia se observa aún más en recursos naturales: el 100 % de los plátanos importados por Estados Unidos proviene de la región, al igual que 97 % de las uvas y 80 % del cobre refinado. Según el informe de la Cepal “Perspectivas del Comercio Internacional de América Latina y el Caribe, 2025”, México logrará aumentos en el volumen exportado de la mayoría de los sectores durante este año.
El sector electrónico será uno de los beneficiados, con un crecimiento estimado superior al 60 %, al no estar sujeto a las nuevas tarifas. El comercio agrícola y agroindustrial también experimentará aumentos de 8 y 19 %, respectivamente, aprovechando las ventajas del TMEC. La excepción será la industria automotriz: se prevé que las exportaciones de automóviles caigan 18 %, y los envíos de otros equipos de transporte disminuyan hasta 60 % debido a los aranceles específicos.
La Cepal advierte que 2026 será un año crítico para medir el verdadero efecto de los aranceles. Si bien algunos sectores logran mantener o incrementar sus exportaciones, otros, como la automotriz, enfrentarán fuertes caídas. La región deberá enfocarse en fortalecer su competitividad, diversificar mercados y explorar nuevas oportunidades para no depender exclusivamente del consumo estadounidense.