Los Ángeles, California.– A pocas horas del estreno mundial de Avatar: Fuego y ceniza, el cineasta James Cameron reconoció que planea reducir su participación en la franquicia que ha marcado gran parte de su carrera, con el propósito de explorar nuevos proyectos y evitar quedar encasillado en una sola saga.
Durante una entrevista reciente, Cameron reflexionó sobre los más de veinte años dedicados al universo de Pandora, al que considera el proyecto más absorbente de su trayectoria. Pese al éxito comercial de la saga, que ha recaudado más de cinco mil 200 millones de dólares en todo el mundo, el director aseguró que ha llegado a un punto de inflexión y que busca nuevos horizontes creativos.
“Tengo otras historias que contar. No significa que vaya a dejar de dirigir, pero sí quiero reducir mi nivel de involucramiento en cada detalle del proceso”, explicó el realizador canadiense en conversación con The Hollywood Reporter.
Cameron también expresó sus reservas respecto al desempeño que podría tener Avatar: Fuego y ceniza, a la que describió como “una moneda al aire”. Dijo que el éxito o el fracaso de esta entrega determinará no solo la continuidad de la saga, sino también el estado actual del cine frente al auge del streaming.
“Podría ser la última. Tal vez el estreno demuestre lo deteriorada que está la experiencia cinematográfica o que sigue siendo igual de poderosa, pero solo para cierto tipo de películas. No lo sabremos hasta mediados de enero”, señaló.
El cineasta, ganador del Óscar por Titanic y Avatar, ha considerado incluso concluir la historia mediante un libro si la nueva película no alcanza las expectativas de taquilla. Reconoció que se encuentra en una “encrucijada”, pues desea que la cinta tenga éxito para completar las dos secuelas restantes, pero al mismo tiempo anhela liberarse para desarrollar otros proyectos.
Su siguiente prioridad sería una nueva entrega de Terminator, lo que le permitiría diversificar su trabajo después de décadas dedicadas al universo de Pandora. “No voy a sumergirme en el abismo de hacer exclusivamente Avatar durante varios años. Quiero encontrar una forma de colaboración que me permita seguir creando, sin perder mi libertad artística”, afirmó.
Ante las críticas de quienes lo acusan de haberse aferrado demasiado a la saga, Cameron respondió con firmeza: “Me siento realizado como artista, y las decisiones sobre mi carrera me corresponden solo a mí. Si otros quieren opinar, pueden hacer sus propias películas”.
La recepción de Avatar: Fuego y ceniza ha sido mayormente positiva. Críticos como Matt Hambidge (FandomWire) la describen como la entrega más emotiva y sólida de la saga, mientras que Ben Travis (Empire) destacó su espectacularidad visual y su ambición narrativa. Aunque algunos analistas consideran que no alcanza el impacto revolucionario de la primera película, coinciden en que mantiene el sello visual y técnico característico de Cameron.
Con Fuego y ceniza, James Cameron enfrenta uno de los mayores desafíos de su carrera: demostrar si Pandora sigue teniendo un lugar en el corazón de las audiencias o si ha llegado el momento de cerrar ese capítulo y contar nuevas historias.
¿Quieres mantenerte a tanto de todas las noticias hoy en Puebla, México y el mundo? ¡Explora más en nuestro portal ahora mismo!
Foto Especial
Djs
