La noche de este viernes, los asistentes al concierto de Dua Lipa en la Ciudad México vivieron un momento histórico cuando la cantante interpretó “Amor prohibido”, de la Reina del Tex mex, Selena Quintanilla. Como ya es su costumbre, Dua Lipa interpreta una canción del país que visita y en esta ocasión no pudo elegir mejor artista.
Después de 3 conciertos en el Estadio GNP como parte de su gira Radical Optimism Tour, le dio a sus fans una experiencia única.
Las dos primeras noches ya habían demostrado que cada concierto traería algo especial. Dua Lipa sorprendió con “Bésame Mucho” en su primera presentación y más tarde unió su voz a la de Fher, de Maná, para interpretar “Oye mi amor”.
Por eso, para el tercer y último show, los rumores apuntaban hacia un posible homenaje a Juan Gabriel. Sin embargo, la británica tomó otro camino que terminó robándose el corazón del público.
Desde las primeras notas de Amor prohibido, el público se encendió, pero cuando comenzaron a escuchar la voz de Dua Lipa, enloquecieron.
El estadio estalló. Muchas voces se unieron a la suya, convirtiendo el tributo en un coro masivo que reafirmó el impacto de Selena en generaciones enteras. Fue, sin duda, uno de los momentos más poderosos de la noche.
El concierto inició con una introducción que evocaba olas marinas y desembocó en la aparición de Dua Lipa con un look plateado que deslumbró al público mientras interpretaba “Training Season”. A partir de ahí, el show no bajó la intensidad.
En la primera parte, sonaron éxitos como Break My Heart, One Kiss, Whatcha Doing, Levitating y These Walls, repasando los momentos más icónicos de su carrera.
Para despedirse de México, Dua Lipa escogió algunos de sus temas más bailables: New Rules, Dance The Night, Don’t Start Now y Houdini. Cada canción fue un estallido de energía que convirtió el estadio en una pista de baile gigante.
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LMR