Pese a que Donald Trump paso gran parte de su campaña promocionándose como el “salvador de la libertad de expresión”, para luego contradictoriamente ordenar la cancelación de programas que le criticarán, los comediantes más famosos de Estados Unidos se vocearon contra la censura.
Esto se da como respuesta a la prohibición del programa de Stephen Colbert, quien se burló del republicano y sus decisiones políticas, así como también por la cancelación que Trump ordeno públicamente del programa de Jimmy Kimmel, por chistes que este hizo sobre Charlie Kirk.
Algo que no sorprendió a nadie que, el controversial comediante conocido por su contenido fuertemente político, Jon Stewart, fuera el primero en vocearse contra las acciones autoritarias de republicano, creando toda una sátira sobre un programa cómico que “complazca al dictador”.
“Muchos negacionistas dirán que las preocupaciones por la libertad de expresión de esta administración son una estratagema cínica, una bola de artimañas, una cortina de humo para la consolidación sin precedentes del poder y la intimidación”, advirtió Stewart en su programa.
Uno de los comediantes que sorprendió a muchos al vocear su postura política fue Jimmy Fallon, quien conduce el programa de entrevistas más famoso de Estados Unidos que, pese a evitar politizar su show, mostró su apoyo por Kimmel así como condenó la censura en cualquier forma.
Otro de los comediantes que lanzó fuertes críticas y burlas al republicano, retándolo directamente fue Seth Meyers, quien ironizo diciendo que nunca se burlaría de Trump, para luego mostrar las múltiples pancartas de Jeffrey Epstein que recibieron al presidente durante su visita a Inglaterra.
“Este es un momento importante para nuestra democracia, y debemos ponernos en pie por la libertad de expresión. Hay un motivo por la que el libre discurso está en la primera enmienda, porque va antes que todos los demás”, declaró el también productor y guionista de televisión.
Quien más apunto a la yugular fue Stephen Colbert, esta vez abandonando todo temor debido a que su programa está a meses de ser cancelado, para dirigirse hacia la audiencia e invitarlos a reflexionar sobre como el republicano esta transformando su país en una dictadura neo-fascista.
Pese a todo esto, el presidente estadounidense celebró su “victoria” indicando que pretende perseguir a más figuras públicas que se atrevan a criticar su gobierno o hacer chistes que no le agraden. Declaró ante los medios que ahora irá detrás de Seth Meyers y Jimmy Fallon.
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Foto: SkyNews
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