En llamada virtual realizada el 4 de septiembre de 2025, el expresidente Donald Trump se dirigió a líderes europeos tras una cumbre en París sobre seguridad para Ucrania y fijó una postura clara: Europa debe dejar de adquirir petróleo ruso, porque al hacerlo estaría financiando la guerra impulsada por Moscú. Esta firme petición fue respaldada por un alto funcionario de la Casa Blanca, quien confirmó que Trump mencionó que solo en un año Rusia obtuvo aproximadamente 1 100 millones de euros de la UE por ventas de combustible.