Más de 450 migrantes han muerto en los últimos dos años fiscales a causa de las políticas migratorias y a manos de los traficantes de personas que los hacen migrar por zonas remotas con temperaturas extremas, a lo largo de los mil 686 kilómetros que abarca la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos (USBP, por sus siglas en inglés) en los sectores de Tucson, El Paso y Big Bend.